La práctica deportiva en la edad
madura se ha considerado por numerosos estudios una de las formas más eficaces
para prevenir algunas enfermedades diabetes, enfermedades coronarias y depresión.
La pirámide poblacional se está invirtiendo (lo que significa que los adultos
mayores de 65 años serán la población más numerosa según la OMS en 2025) y los
recursos en Servicios Sociales y Sanidad son cada vez más escasos, es por lo
tanto especialmente importante buscar alternativas viables y económicas que sirvan para mejorar la
calidad de vida de las personas.
Todos los deportes en general
sirven a ese aumento cualitativo de la calidad de vida y por tanto a una mejora
de la salud y a generar en nuestro
cuerpo neurotransmisores que provocan un rendimiento más eficaz a nivel
físiológico y mental. No obstante en mi caso
por conocimiento y porque he visto el potencial que puede tener nuestro
deporte voy a compartir con vosotros la
idea que sirvió para finalizar mi trabajo de fin de carrera sobre Psicobiología
de las emociones: Tenis de Mesa y Parkinson.
La enfermedad se caracteriza básicamente por una
serie de síntomas motores (
temblor, rigidez muscular, episodios de
bloqueo, trastornos del equilibrio …) y síntomas no motores ( trastornos afectivos, depresión , ansiedad).
El origen de la enfermedad es hasta el momento desconocido, pero se sabe que la
disfunción aparece con la pérdida de ciertos neurotransmisores y el mal funcionamiento de receptores
presinápticos y postsinápticos.
La hipótesis
La intervención
mediante la práctica deportiva del tenis de mesa en afectados de párkinson
puede tener influencia significativa
en variables psicosociales ( tales como
afecto positivo, autoconfianza y apoyo social ) y/o cambios a nivel neuropsicológico y bioquímico.
Mi hipótesis de trabajo se basaba
en observaciones realizadas en afectados de Parkinson jugando a tenis de mesa.
El responsable de esta iniciativa deportiva fue Gerardo de Gracia entrenador
del CTM Getafe que trabajaba con ellos desde hace dos años en la Asociación Parkinson
Madrid.
Ver a afectados de distintas edades que llegaban a la mesa con
una movilidad muy limitada empezar a jugar y poder apreciar los ciertos cambios me hizo pensar en la posibilidad que
puede tener este deporte en la mejora de
los síntomas físicos y anímicos de la enfermedad.
Por qué el Tenis de Mesa
Algunos de los sistemas neurales
implicados en la práctica del Tenis de mesa son: áreas prefrontal de asociación ( responsable de la toma de
decisiones y planificación), córtex premotor (responsable de la coordinación de
movimientos voluntarios), área de asociación primaria (responsable de los
movimientos voluntarios), córtex primario somatosensorial y áreas de asociación
sensorial (implicados en la propiocepción y sensaciones físicas), áreas límbicas ( procesamiento emocional), núcleos motores del tronco del encéfalo. Sistemas
moduladores como el cerebelo y los ganglios
basales, implicados en el control postural, restablecimiento de equilibrio, planificación
de nuevos movimientos, ejecución suave y precisa y por último programación de secuencias coordinadas de
movimientos y coordinación temporal.
Desde el punto
de vista funcional , la práctica del ejercicio de casi cualquier actividad
física implicaría la puesta en marcha de estos mismos mecanismos, pero en el Tenis de Mesa la precisión,
antelación y rapidez del juego con una velocidad donde la pelota viaja a una
velocidad de 180 km
por hora y realiza giros de hasta 150 revoluciones por minuto en un espacio
limitado de 2, 74 metros de longitud un
ancho de 152, 5 cm , lo hacen especialmente relevante para una
práctica tanto motora como cognitiva altamente especializada. La influencia del
Tenis de Mesa en la actividad cognitiva
se manifiesta en los procesos de
percepción, atención, memoria, planificación y toma de decisiones áreas
afectadas en la enfermedad. La musculatura que trabajamos se hacen más fuerte este mismo principio rige cuando
trabajamos grupos de fibras nerviosas y de áreas de asociación, las conexiones
entre fibras neuronales que trabajan son las que mejor se mantienen.
Nuestro deporte tiene muchos elementos que
adaptados a la idiosincrasia del jugador afectado, pueden influir de manera
positiva tanto a la neurogénesis ( creación de nuevas neuronas) , como a la
amortiguación de la destrucción neuronal ( apoptosis) por los efectos del estrés, ansiedad y depresión
que acompañan al Parkinson entre otros.
Cada vez toman mayor fuerza las teorías que indican que la plasticidad
neural, y áreas del cerebro que actúan para facilitar determinadas funciones,
pueden ser sustituidas por otras en caso de lesiones (Damasio, 2010). Los
mecanismos endógenos y factores que
favorecen la neurogénesis en adultos están siendo investigados, entre algunos
de estos factores se encuentran el
ejercicio físico, alimentación saludable y un ambiente social rico en
estímulos.
El proyecto Párkinson en CTM Getafe.
Aunque con
limitaciones propias de la enfermedad, cuyo grado de afectación incide
directamente en el desarrollo del
entrenamiento, hemos observado a lo largo de este tiempo que nuestros jugadores tienen en común un grado de concentración muy
elevado, una determinación en la
ejecución de los golpes importante y un refuerzo social entre los ellos que aumenta el estado de ánimo positivo
observable en conductas verbales,
refuerzo positivo, aumento del sentido del humor y conductas de ayuda entre
compañeros. Además un aspecto muy
llamativo de la observación en la práctica deportiva, es que las dificultades
motoras propias de la enfermedad, en algunos casos no son evidentes cuando entrenan. Es más, en muchos casos ellos mismos indican que la práctica de este deporte les permite moverse con más
facilidad tras el entrenamiento. El sonido rítmico de la pelota durante la práctica, comentan, que les ayuda en la concentración y
en el mantenimiento de un ritmo físico que incrementa su movilidad y que llegan
a comparar con ciertos ejercicios que realizan en músicoterapia. Otro aspecto
importante que señalan es que la práctica del deporte incrementa sus niveles de afecto positivo, autoconfianza,
autoestima y perciben una mejoría física
observable en los síntomas motores y en el estado de ánimo.
El proyecto lo empezamos con ilusión hace un año y hoy los resultados
con los afectados que han mantenido la continuidad en la práctica deportiva es
notable. El jueves que viene acudiré con mis compañeros de CTM Getafe a la
presentación del Proyecto Deporte y Párkinson
en la Casa de Encendida invitados por uno de nuestros jugadores más
destacados Paco Montesinos.
Me alegra ver que hospitales universitarios y
fundaciones que tiene medios económicos puedan
investigar y desarrollar nuevas terapias alternativas y que cuenten con nuestro
deporte.
Lamento que desde las Federaciones y otros estamentos deportivos que
también pueden tener medios económicos para desarrollar estos proyectos, no
dediquen esfuerzos a la investigación o implantación de este tipo de desafíos deportivos no tanto para que den la subvención de turno , si no para realmente
confirmar que los efectos físicos
son tangibles . Pero claro la INVESTIGACIÓN es una inversión a largo plazo, costosa, a
veces improductiva pero es una inversión
que nos ha dado una esperanza de vida nunca vista hasta ahora, la INVESTIGACIÓN
salva vidas.
Espero que con el tiempo y estudios rigurosos a los que lamentablemente
en nuestro club y con nuestros medios actuales no podemos llegar, alguna
institución pueda demostrar que el Tenis de Mesa puede plantearse como un deporte
retador que influya en la calidad de
vida en enfermedades neurodegenerativas.
Una actividad deportiva donde la movilidad sea limitada en
un espacio discreto, el grado de concentración máximo, el esfuerzo físico pueda
ser adaptable a edad o estado físico de los practicantes, donde coordinación viso-espacial y motora, la
atención externa pueda ser más relevante que la atención interna y por último
donde la práctica deportiva sea individual
lo que permite mayor adaptabilidad a las condiciones físicas del jugador, pero que su práctica se puede desarrollar en
grupo, lo que aporta los beneficios de la pertenencia a un grupo , el apoyo
social, las conductas de afecto y de estima que hacen que el Tenis de Mesa sea un deporte a tener en
cuenta.
Dedicado a todos los investigadores, a los afectados de
enfermedades neurodegenerativas, a los voluntarios y familiares que les cuidan,
protegen y ayudan.
Dedicado a Paco, Astrid, Miguel, Leopoldo, José Antonio y a
todos nuestros jugadores que nos dan lecciones de vida que no enseñan los
libros.